jueves, 14 de abril de 2011

Si pudiera, te diría...

http://www.youtube.com/watch?v=S6NZ1PBM6b4&feature=fvwrel

Hola, mi amor:

Ojalá pudiera decirte todas las cosas que pienso, las cosas que siento. Porque, si pudiera, te diría tantas cosas; sabrías tantas cosas que no sabes...

Te diría que no me considero una persona desgraciada, pero que estoy profundamente triste; y llevo tanto tiempo así que ya no sé si lo estoy, o es que lo soy. Te diría que nada me gustaría más que poder retroceder en el tiempo y borrar el día en que nací. Que me siento un niño indefenso al que le aterra esta oscuridad que llaman mundo; un mundo que yo no consigo entender y por el que camino moviéndome de error en error, el siguiente más grave que el anterior. Te diría que, en mi mente, jamás dejo de llorar, ni de día, ni de noche. Te diría que te quiero tanto que me encantaría volver atrás en el tiempo y no besarte jamás, para seguir haciéndote feliz con una palabra, un abrazo o una simple mirada. Volver a ese momento en el que solo sacaba lo mejor de ti, cuando éramos amigos, cuando nos queríamos de verdad, sin dañarnos; cuando solo te hacía feliz, y nunca triste. Te diría que, si existe algo en mi vida que me gusta, si hay algo que yo no borraría, eso eres tú. Te diría que llevo clavadas en el corazón todas y cada una de las lágrimas que has derramado estando a mi lado. Te diría que no quiero hacer nada de lo que tenemos planeado, ni pisar ninguno de los lugares con los que soñamos, para no ensuciar tu vida ni llenarte de recuerdos que tengas que borrar; para que algún día puedas hacer esos sueños realidad por primera vez con alguien con quien no te duela mirar atrás. Te diría que me enfado y luego, cuando recapacito, me doy cuenta de que sueño con el momento en el que me olvides, me cambies por alguien con quien tener los días que tú te mereces. Te diría que hay pocas cosas que desee tanto como desaparecer de tu vida sabiendo, como sé, que el menor de los males que puedo causarte es alejarte de mí.

Si pudiera, te diría tantas cosas... que no entenderías que, en realidad, lo que quiero que sepas, ahora y siempre, es que te quiero con todo mi corazón. Aunque no sepa hacerlo mejor.

lunes, 4 de abril de 2011

La soledad no quita el frío.



Hay un dibujo huérfano de madre que pende de mi pared. Aún no me he atrevido a quitarlo. No como algunas otras cosas, que ya no están, que se mueren de amor en el fondo del armario. Sé que está triste. Se lo noto en la tinta; porque este dibujo... está pintado. "Pero si tú no sabes llorar", le digo, y me responde que eso es porque aún no se ha puesto el Sol; me dice que, entonces, seré yo el que le enseñe a hacerlo y que, en ese mismo entonces, ni él podrá consolarme.

Y es que hay una reina que ha perdido a su rey; un rey que guardó la primera lágrima que se desprendió de su corona junto con entradas de cine que esconden secretos que podrían llevarlos a la cárcel, servilletas que hablan de amor y corazones verdes que prometen imposibles.

Te echas en la cama y tiras de la soledad un poco más, para cubrirte entero. Pero ocurre que, al tirar, se te quedan los pies fuera y el frío se te cuela por debajo. Y entonces aprendes que, hagas lo que hagas, la soledad no puede quitarte el frío.